Objetor de Conciencia Finlandés solicita asilo político en Bélgica.
En julio del 2001, Jussi Hermaja fue sentenciado por la corte finlandesa por ser objetor total nada especial, tan sólo uno de los 70 casos por año. Sin embargo, a diferencia de la mayoría de los otros objetores de conciencia, Jussi Hermaja no se reportó a la cárcel y huyó a Bélgica en octubre del 2001, donde solicitó asilo político. Este fue el principio de un caso de asilo político muy especial. Bélgica fue una buena elección.