Los grupos antimilitaristas vascos KEM-MOC y Kakitzat se manifestaron el 23 de enero frente a la sede principal del banco BBVA, bajo el lema “El BBVA financia la guerra - Gastu Militarrik ez”. Algunos antimilitaristas se zambulleron en la fuente del banco.
El BBVA colabora y se beneficia con la guerra a través de su participación en la industria militar, como accionista de empresas que son proveedores del sector de defensa. Entre ellas se cuentan INDRA, RYMSA, CESCE, HISDESAT, IBERICA DEL ESPACIO...