¿Qué es la noviolencia y por qué usarla?
¿Por qué estás interesado en un Manual de campañas noviolentas? Probablemente porque quieres hacer que algo suceda o quizá porque quieres evitar que pase algo. Quizás intuyes que la noviolencia puede ofrecer alternativas a acciones que generan hostilidad y que, en definitiva son estériles, al menos desde el punto de vista de lograr cambios sociales. A lo mejor quieres probar algo diferente o consejos para mejorar la forma en que tu grupo organiza acciones y campañas.
En este Manual, nuestra definición básica de noviolencia está basada en el deseo de acabar con la violencia, sea violencia física o lo que se conoce como violencia estructural (privación, exclusión social y opresión) sin cometer más violencia. Ésta no es una descripción definitiva ya que existen otras definiciones más elocuentes, más filosóficas, más específicas de un momento, (o sea es decir, que significaron mucho en determinado lugar y tiempo determinado), y personales, más bien poéticas.
La noviolencia puede suponer mucho más que esta definición básica, incluyendo el deseo de cambiar las relaciones de poder y las estructuras sociales, una actitud de respeto por toda la humanidad y por toda forma de vida, e incluso una filosofía de vida o una teoría de la acción social. Os animamos a que exploréis todas esas áreas. Puede ser una experiencia muy rica en el contexto de un grupo que se prepara para realizar acciones noviolentas, el descubrir las diferencias en énfasis y compartir la manera de entender la noviolencia. La gente tiene diferentes razones para adoptar la noviolencia. Algunos la defienden porque la ven como una técnica efectiva para conseguir cambios sociales, otros, porque quieren hacer de la noviolencia una forma de vida. Hay un espectro amplio con toda una gama de posturas. Estas diferencias pueden emerger durante una campaña pero normalmente una declaración de principios o unas directrices específicas para una campaña concreta (ver “Principios de acción noviolenta” p. X y “Directrices noviolentas” p. X) pueden ayudar a gente con diferentes puntos de vista.
Sin embargo, hay ciertas diferencias en la manera de entender las cosas pueden ser motivo de fricción en una campaña y es necesario airearlas. Por ejemplo, mientras hay quien piensa que habría que desplegar los métodos de noviolencia para enfrentarse a un conflicto y ganar, otros argumentan que una actitud clave de la noviolencia es buscar una solución que incluya a los que hoy son los adversarios. Lo esencial en un conflicto de este tipo es que los partidarios de cada postura no debatan actitudes básicas sino que se pongan de acuerdo en puntos que afectan a la campaña. En este ejemplo concreto (cuando algunos quieren “ganar” y otros buscan una solución inclusiva) el acuerdo alcanzado influiría en las peticiones y la estrategia de negociación que los activistas comprometidos en esta campaña elaboren.
La cuestión del daño a la propiedad puede ser causante de divisiones. Algunos activistas noviolentos prefieren no causar daño a la propiedad mientras que otros creen que merece la pena el coste infligido al oponente. En la tercera sección hablamos sobre el valor de la campaña o las directrices de acción. Las actitudes en un tema como el de daño a la propiedad podría requerir un debate al redactar tales directrices. No se debería posponer ese debate hasta que empezara la acción. Para algunas personas la acción noviolenta significa evitar el comportamiento hostil hacia los adversarios, quizás hasta “ buscar lo bueno que tiene todo el mundo”, mientras que otros activistas noviolentos pueden buscar “avergonzar” a un adversario, o tacharlos como “criminales de guerra” o “torturadores”, “racistas”, o “corruptos”.
La cuestión de gritar insultos o términos despectivos se puede tratar en las directrices de la acción, pero las diferencias subyacentes y las posibles combinaciones de actitudes se pueden tratar con mucha más profundidad en el tipo de “grupos de afinidad” tratados en la sección sobre la preparación de la acción noviolenta (ver “Grupos de afinidad”, p. X). Esos grupos buscan ser un “lugar seguro” para sacar dudas y al mismo tiempo aprender unos de otros. Los miembros de grupos de afinidad pueden tomar una frase comúnmente asociada a la acción noviolenta como, por ejemplo, “decirle la verdad al poder”, y que cada miembro del grupo explique como la entiende y qué cuestiones le suscita, compartiendo ideas y profundizando en lo que cada uno entiende que están intentando hacer juntos.
Una actitud común a los activistas noviolentos es que queremos que nuestras actividades sean una expresión del futuro que estamos intentando crear: esto podría estar encarnado en lo que Mohandas Gandhi llamó programa constructivo (ver “Programa Constructivo”, p. X), y también en la idea de nosotros/el movimiento “seamos la paz”, que nuestro comportamiento refleje el mundo que queremos. Cuando usamos frases como por ejemplo “decir la verdad al poder”, “apoyar la vida”, o “respetar la diversidad”, estamos invocando valores fundamentales que son en sí mismos una fuente de fuerza para nosotros y un punto de contacto con aquellos a los que queremos llegar.