Thales es una empresa francesa, de la que el Gobierno francés posee una parte, que construye una amplia gama de radares, sonares y satélites de vigilancia electrónica, sistemas de comunicación táctica y de gestión de combate, drones, aviónica del helicóptero, vehículos blindados, sistemas de morteros y misiles. En una lista de los mayores fabricantes de armas del mundo durante 2016 que el SIPRI armó, Thales aparece en el décimo lugar, con un valor de 8170 millones de dólares en ventas de armas, lo que constituye el 50 % de las ventas totales de dicha empresa. Thales tiene 64‍ 100 empleados y opera en más de 50 países.

Lobby en la UE

Durante los últimos cinco años, Thales ha gastado más de un millón de euros para hacer lobby en la UE. Thales es miembro de la EOS (European Organization for Security), una organización de empresas de defensa y seguridad que presiona a la UE para obtener fondos y para ejercer influencia en el planteamiento del bloque sobre defensa y seguridad. La EOS ha hecho mucho hincapié en los programas tales como EUROSUR, el sistema integrado de vigilancia fronteriza de la UE, que recopila datos de diferentes países de manera instantánea. Las empresas armamentísticas como Thales fueron fundamentales en el desarrollo de EUROSUR y continuarán beneficiándose con este programa en el futuro.

De acuerdo con el informe de Guerras de Frontera, Thales ha recibido 6 966 736 euros en fondos de la UE por su participación en veintitrés proyectos diferentes de desarrollo e investigación. En 2012, en colaboración con la empresa española Aerovisión, la compañía introdujo un dron llamado FULMAR, un sistema nuevo de vigilancia para fronteras marítimas y ribereñas que fue presentado y probado específicamente durante una demostración de tres días por FRONTEX, la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas. En 2014, Thales respondió a una licitación de Turkmenistán para un sistema de vigilancia satelital para los países que limitaban con Afganistán, aunque no se reveló quién se terminó quedando con el contrato.

Armas nucleares

Thales también fabrica componentes clave para el sistema de armas nucleares francés. En 2004, junto con las empresas armamentísticas Airbus, Safran, SNPE y DCNS, Thales firmó un contrato por tres mil millones de euros para construir misiles M51 para los submarinos nucleares franceses. Cada M51 carga entre seis y diez ojivas termonucleares y fueron lanzados por primera vez en 2010.

Drones

Thales, junto con la empresa israelí Elbit, desarrolló el dron de vigilancia y reconocimiento Watchkeeper 450 para el ejército británico. El Reino Unido ordenó en 2007 cincuenta y cuatro drones Watchkeeper 450 a un costo de 800 millones de libras esterlinas, incluido el costo de las nuevas instalaciones en el aeródromo Boscombe Down, Wiltshire. El proyecto excedió en gran manera el presupuesto y duró más de la cuenta y, para 2015, se esperaba que los drones costaran mil doscientos millones de libras esterlinas, a pesar del tiempo de servicio activo por dron equivalente a dos días. El Watchkeeper 450 se basó más que nada en el dron Hermes 450 de Elbit, muy usado por el ejército israelí en Gaza.

En 2017, la dirección general de armamento de Francia anunció que habían ordenado a Thales ciento cinco sistemas de drones Spy’Ranger, a un costo de 104,3 millones de euros. El Spy’Ranger es un sistema de aeronaves diminutas no tripuladas, capaz de transmitir en directo imágenes de alta definición para ayudar a las fuerzas militares terrestres en el reconocimiento, la adquisición de objetivos y la vigilancia. El contrato del Gobierno francés con Thales incluye diez años de mantenimiento y los drones serán entregados entre 2018 y 2019.