Colombia tiene uno de los conflictos armados internos más antiguos de Latinoamérica, que cuenta, por un lado, con diferentes actores armados en confrontación, como son las guerrillas del ELN y las FARC, los paramilitares, las fuerzas militares y demás cuerpos de seguridad del Estado, y, por otro lado, otros actores de poder implicados en la guerra, como la clase política y económica, las empresas transnacionales, y los medios masivos de comunicación, que pertenecen a los imperios económicos nacionales, los cuales respaldan abiertamente el gesto militar y beligerante de la política del actual gobierno.